23 junio, 2008

Ausencia de luz.


Delirio no es sino sinónimo de belleza,
un desahogo del océano desesperado,
un llanto del cielo buscando aliento.

Lágrimas que escupen las flores,
¿y todo para qué si la noche no se va?
Los rayos solares siguen en duelo.

Las olas chocan contra las rocas furiosas,
buscando respuesta a la ausencia
que antaño les dejaste.

1 comentario:

JR dijo...

Vuelve ardiendo el verano
en estas brasas de infancias,
arden las estrellas en su cielo de carbón,
arden los montes,
la sed del fuego.

Arden nuestros cuerpos acostados
en las arenas de las playas,
arde el centro de nuestro mundo,
ardiendo nuestros ojos,
buscando consumirse en el oleaje.


feliz verano poetisa